Dolmen de planta pentagonal al que faltaba a finales de los cincuenta, cuando Sánchez y Spahni hicieron su inventario, un pilar de la entrada. Hoy día prácticamente está destruido por efecto de expoliadores clandestinos. Durante su excavación Siret encontró de cuatro puntas de flecha de sílex, un cuchillo y un fragmento de otro, también de sílex, cinco ídolos y dos ídolos falange, dos cuentas de collar de cobre, cerámica y cinco esqueletos humanos.