Planta trapezoidal (3,70 x 2,10 x 1,90 de altura), con corredor de antas en mampostería, elemento que lo hace único en el grupo de Alicún. Otro elemento arquitectónico específico consiste en la utilización de un ortostato de 1,50 m. de anchura que separa la cámara del corredor de una pieza con una perforación cuadrada a modo de acceso de 70 cms. de anchura por 80 cms. de altura. Orientación Sur-sureste. Quizás se trate de uno de los mejor conservados de todo el grupo. La cubierta de la cámara estaría compuesta de cuatro ortostatos, de los que se conservan tres. Casi totalmente enterrado. Siret referencia entre el ajuar funerario 4 puntas de flecha y un fragmento de sílex. Aparecieron dos esqueletos humanos. Casas, a pesar de afirmar que fue “descorchado” por él mismo, apenas encontró elementos del ajuar funerario, a excepción de “un conjunto de huesos humanos completamente desarticulados y en avanzado estado de descomposición. Con ellos, dos o tres sílex atípicos y escasos fragmentos de cerámica” (Casas, 1949: 92). La estructura con la que está construida la cámara es curiosamente simétrica, ya que en la pared posterior hay un ortostato de 1,25 de ancho, delimitado por otros dos de 0,5 y 0,6 cada uno; ambas paredes, la oriental y la occidental, presenta un ritmo de anchura más o menos constante: en la parte asociada a la cabecera arrancan a la vez un ortostato a cada lado de casi 1 metro de anchura; posteriormente encontramos otro que ronda 1,40 y, por último, en la zona adosada a la entrada desde el corredor, mientras que por el este hay dos ortostato más, uno de 1,00 y otro de 0,60, por el oeste el cierre se produce con uno solo de 1,30 metros de anchura. La sepultura sigue parcialmente enterrada, aunque no conserva ningún elemento que nos permita pensar en la existencia de anillos peristilíticos, si bien es cierto que el rebaje realizado en su entorno puede haberlos hecho desparecer por completo, ya que el diámetro del túmulo conservado apenas supera los 7 metros.