Los restos que se observan deben corresponder a una torre atalaya de época árabe, de figura cilíndrica y planta circular. Parece ser que estaba construida con mampostería ya que se encuentra enterrada, pudiendo tener una altura conservada de 1,50 metros. En el lado oeste hay un gran agujero por el que se aprecia cómo la mampostería llega hasta el terreno natural. Hay cerámica medieval y restos de ladrillo en la cumbre del pequeño cerro.